lunes, 19 de abril de 2010

Elección

Añorando una vida que jamás he sentido mía, a la que nunca antes he tenido apego, por la que jamás luché para conservar. Hemos combatido en el infierno donde llueven flechas que no distinguen alma pura de impura. ¿Quién nos ha dotado jamás para emitir juicio sobre la vida ajena? ¿Cómo evitar que caigan inertes sobre la dura piedra? Criaturas celestiales, demoníacas y humanas comparten un mismo rasgo: un intachable egoísmo. No han dejado de evidenciarlo en cada uno de sus pasos.

Y ahora, elegir. Una vida irreal, cubierta estoy de ensueño, de mentira. Una ilusión en la que puedo discernir cada detalle que diste con la realidad. Nos esperan fuera, dice Isaac. ¿Por qué no puede ser esta mi realidad? Un proyecto que solo ha servido para arruinar nuestras vidas.

Quisiera despojarme de mis propias alas para poder volar con una verdadera libertad. Quisiera poder haber escogido mi propio camino, mis propios errores, mis propios tropiezos. Haber guíado mi vida como todo humano puede hacer.
Nos brindan la vida y el paraíso. Dudo que haya retorno, y es imposible tomar parte de los dos.

Quiero entregarme en cuerpo y alma a aquel al que decidí entregar mi corazón, sin temor a la condena. Quiero sentir como me hundo entre la multitud y ser una más. Solo una más

3 comentarios:

  1. Te mentiría si dijera que no puedes elegir... Galadriel.

    ResponderEliminar
  2. Siempre, siempre, puedes elegir y hacer que los pequeños gestos y cosas cambien tu realidad. Pero en vez de verlo como la maldición que es ¿Por qué no usar tus dones para la gente que lo necesita? ¿Por qué retorcerse en la angustia de las lamentaciones? No podemos elegir cómo nacer, pero sí podemos elegir cómo vivir nuestra vida. Agárrate fuerte a la vida, a la real, y hazla tuya.

    ResponderEliminar
  3. creo que podemos elegir, pero es tan difícil cambiar de verdad como remar a contracorriente. sin embargo a lo largo de una vida debe hacerse varias veces...
    Saludos!

    ResponderEliminar