Escritos prohibidos, que traen desconcierto y caos a la muchedumbre. Si tan solo una de sus palabras saliera a la luz, la soledad volvería a envolverla.
En ellos, se esconde el profundo sentimiento del alma celosamente protegida. Mudo observador, que se deleita en su sonrisa. No me dejes caer.
Pero la lluvia, aunque placentera, el humor ensombrece. Nos obliga a cubrirnos, entre negros pensamientos. Silencios que lo dicen todo, ausencias que todo lo muestran.
La dulce canción cubre la noche, mostrando la alegría hace años olvidada.
martes, 3 de febrero de 2009
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La dulce nana que nos acuna desde lo lejos. A veces los silencios murmuran.
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