martes, 3 de marzo de 2009

Garabatos

En el suelo, dibujados mil garabatos sin sentido... Moviendose en su mente intentando hallarse un sentido a si mismas. El niño las contemplamba absorto, viendo como su creación aparentemente simple tomaba vida propia.

Levantó la vista al ver a alguien frente a él. Era un hombre, que miraba curioso las formas que el pequeño había dibujado con su dedo en la arena. Se agachó para observar al niño, que le devolvía la mirada con total pasmo.

El hombre esbozó una sonrisa: había encontrado un pequeño trazo de algo perdido en los ojos del pequeño. Un mundo que solo algunos podían alcanzar. Y él estaba allí para guiarlo en su camino, para devolverlo al mundo donde las ideas son el aire a respirar, las palabras son la sangre y tan solo se oye el suspiro del soñador.

3 comentarios:

  1. En un corto despliegue de palabra casi me atrevería a decir que intentas y lo consigues filosofar un poquito y haciéndonos pensar en cual es el mejor camino a seguir, siempre guiados por alguien de mayor experiencia...

    También pasaba a darte las gracias por tu visita a la gatera, en la cual he dejado las puertas abiertas de par en par para que te adentres cuando puedas y desees.

    Yo en esta tu casa la he encontrado muy acogedora, me gusta tu forma y estilo de escribir, dejando ver a una persona muy bien formada de más edad que la que dices tener.

    Y por tal motivo que casi me autoinvito yo misma, si tu me lo permites.

    Un abrazo y hasta pronto, nos vemos.

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  2. Estamos como ciegos (ya nos refería Saramago sobre la cuestión),necesitamos desesperadamente la guía de los chicos para regresar a ese lugar sin nombre,de inconsciente puro,de juego,libertad y sueños.
    Precioso relato querido amigo !!! no te canses nunca de escribir sobre estas urgencias del Ser.
    Un gran abrazo.

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  3. Adolfo me robó las palabras, amigo.

    No me quda más para decir.

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